Cada vez son más numerosos en Fuerteventura y Lanzarote los tendidos eléctricos sobre los que los alimoches ya se pueden posar con seguridad. En el ámbito del proyecto IFE Egyptian vulture, EDistribución Redes Digitales llevó a cabo una serie de intervenciones de aislamiento en 220 torres del tendido eléctrico.
La muerte por electrocución era, desde hacía mucho tiempo, uno de los principales factores limitantes del crecimiento poblacional de alimoches en Fuerteventura y Lanzarote, donde las torres del tendido eléctrico para la distribución de energía eléctrica de 66 y 132 kV suelen ser utilizadas como aseladeros, tanto durante el día como por la noche. En algunos tramos, sobre todo en los que están cerca de los puntos de alimentación, se suelen reunir de 15 a 20 individuos para pasar la noche. A finales de la temporada de reproducción de 2020, se observaron en Fuerteventura 40 individuos descansado en una sola torre.
Desde finales del siglo XX –cuando se inició la monitorización del «guirre»– hasta 2017, murieron 67 ejemplares por electrocución, la mayoría de ellos en Fuerteventura donde se concentra la mayor parte de la población de la especie.
Para garantizar un descanso seguro a los alimoches, EDistribución Redes Digitales (anteriormente Endesa Distribución Eléctrica) lanzó en 2004 un plan de modificación de las torres adoptando varias soluciones técnicas (la prolongación de las cadenas de aisladores, la instalación de fundas aislantes, etc.).
El número de accidentes descendió rápidamente pero, debido a la expansión de la población de alimoches, el problema de la electrocución volvió a aumentar porque las torres de ciertas áreas, que en el pasado habían sido abandonadas, no eran seguras para posarse.
Gracias al proyecto LIFE Egyptian vulture, el Gobierno de Canarias llevó a cabo un estudio minucioso basado principalmente en las informaciones proporcionadas por los GPS implantados en un gran número de alimoches, a partir del cual se pudo evaluar el riesgo de electrocución en 2.112 torres localizadas en Fuerteventura y 1.146 en Lanzarote.
Analizando una serie de factores como, por ejemplo, el tipo de estructura de las torres, la frecuencia de uso y el número de alimoches que se posan en ellas, se elaboró un inventario para localizar las torres con el riesgo más alto de electrocución y poder intervenir con la máxima urgencia.
Entre marzo de 2018 y junio de 2022, EDistribución modificó 178 torres situadas en Fuerteventura y 42 en Lanzarote, sobre las que actualmente los alimoches se pueden posar sin riesgo alguno.
Asimismo, gracias al acuerdo vigente entre el Gobierno de Canarias y EDistribución, entre 2018 y 2021 se corrigieron otras 60 torres más (30 en Fuerteventura y 30 en Lanzarote), para reducir aún más el riesgo de electrocución del alimoche en estas islas. El acuerdo será válido hasta 2024.